presidente de brasil Luiz Inácio Lula da SilvaDebate abierto este martes Asamblea General de las Naciones UnidasCon un potente mensaje contra el hambre, la pobreza y la desigualdad en el mundo.
“El hambre debe ser una cuestión central”, afirmó Lula, que citó que “735 millones de personas van a dormir esta noche sin saber si comerán mañana”, en un “mundo cada vez más desigual” y donde “cada niño está destinado a nacer”. en este planeta.” Parece encontrarse en el vientre de su madre, donde nació y por “su clase social”.
Según Lula, la discriminación debe “incitar a la indignación” y, a partir de ese sentimiento, “construir” un mundo más justo, solidario y fraterno.
“Es absolutamente necesario superar esta dimisión que nos obliga a aceptar tanta injusticia como un fenómeno natural”, declaró el presidente brasileño, quien señaló que “no hay duda de que falta voluntad política” entre quienes gobiernan el mundo para resolver estos problemas.”
Lula pronunció su primer discurso en Naciones Unidas
En su calidad de Presidente de Brasil, como es tradición en las Naciones Unidas, Lula pronunció su primer discurso ante la Asamblea General, que fue la octava comparecencia de Lula ante las Naciones Unidas.
Regresó al foro en 2003, y luego de aparecer continuamente en sus dos primeros mandatos hasta 2008.
En esta ocasión, lamentó tener que volver a referirse al hambre y la desigualdad como dos grandes amenazas que pesan sobre la humanidad, como lo había hecho en 2003.
Añadió que ahora, veinte años después, se suman las consecuencias del calentamiento global, que “sufren los países más pobres”, pero aseguró que no ha “perdido la esperanza” de que la comunidad internacional sepa cómo afrontar “correctamente” Por supuesto” y todo centra su agenda global en la lucha contra la desigualdad.
Criticó la guerra en Ucrania
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó este martes ante la Asamblea General de la ONU que la guerra en Ucrania es una prueba de la “incompetencia” de la organización y de la comunidad internacional, que apuesta más por las armas que por la paz.
“No habrá prosperidad sin paz“, porque “los conflictos armados son una afrenta a la humanidad” y promover “una cultura de paz es obligación de todos”, pero “no todos lo aceptan”, declaró Lula, quien subrayó la necesidad de sentar a Rusia y Ucrania a la mesa de negociaciones.
“Es preocupante que haya viejos conflictos sin resolver y que estén surgiendo nuevas amenazas”, declaró Lula, quien se refirió a los numerosos conflictos que persisten en Medio Oriente, África y otras regiones del mundo.
Hablar de discapacidad colectiva
La guerra en Ucrania, según Lula, “condena nuestra incapacidad colectiva para implementar los principios de las Naciones Unidas”, a los que llamó a entender que “ninguna solución durará si no está respaldada por el diálogo”.
Criticó que los países ricos “invierten mucho en armamento y muy poco en desarrollo” y condenó las “sanciones unilaterales”, que “sólo causan graves daños a los países afectados”.
Se pronunció contra “cualquier intento de recrear la Guerra Fría” y condenó que los propios países del Consejo de Seguridad de la ONU “declaren la guerra” y la promocionen ante el mundo.