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Los hospitales de la Franja de Gaza se convertirán en morgues a medida que pierdan energía, dejando morir no sólo a los enfermos y heridos en la guerra entre Israel y Hamás.Pero también los recién nacidos en incubadoras y los ancianos recibiendo oxígeno, denunció hoy el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
“Se suspende la diálisis renal y no se pueden tomar radiografías. El sufrimiento humanitario causado por esta escalada es atroz e insto a las partes a minimizar el sufrimiento civil.“, afirmó el director humanitario para Oriente Medio, Fabrizio Carboni.
El miércoles por la tarde, una central eléctrica de Gaza se quedó sin combustible y cerró, interrumpiendo la única fuente de electricidad de la Franja, confirmó la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
Según los responsables de las instalaciones, Israel les ha advertido que atacarán la planta si consiguen que el combustible vuelva a funcionar.
Además de afectar hogares y hospitales, los cortes de energía significan que no hay suficiente energía para operar pozos y bombear agua a través del sistema, operar plantas de desalinización y purificación de agua y mantener los servicios de saneamiento.
La grave escasez de agua potable afecta a más de 650.000 personas
Además, cuatro de las cinco plantas de tratamiento de aguas residuales de Gaza han dejado de funcionar por falta de combustible, y cada día se vierten al mar más de 120.000 metros cúbicos de aguas residuales. Venezuela En Directo