Tarek William Saab, fiscal general chavista, indicó este lunes 29 de abril que Leopoldo López, Julio Borges y Carlos Ocariz están acusados de complicidad con Tarek El Aisami, detenido en el caso de corrupción PDVSA-cripto, por conspirar y derrocar a Nicolás Maduro.
En conferencia de prensa en el Ministerio Público, Saab reveló que Samarque López, detenido por un caso de corrupción, anunció que mantuvo conversaciones con estos y otros líderes opositores desde 2018.
Como prueba incriminatoria, el fiscal presentó notas de voz públicas de las reuniones virtuales y dejó claro que El Aissami estuvo involucrado no sólo en casos de corrupción moral, sino también en “corrupción política e ideológica” que los llevó a “unirse con los peores enemigos”. “de la “patria”. .

Sub Samark presentó tres notas de voz de diversas conversaciones entre López y la oposición.
La primera que presentó Saab fue una llamada de Julio Borges a Samarque López en la que le informaba que James Storey, ex embajador de Estados Unidos en Venezuela, había solicitado acciones para demostrar su poder. Entre ellos nombró: la liberación de los presos políticos, los detenidos en el caso Citigo y la filtración de información.
Según la grabación, se le dio una recompensa a López si no cooperaba.
Otra grabación, en la que habrían participado Borges y Carlos Ocariz, habla de una reunión con Tarek El Aissammi, ya que consideran al exministro de Petróleo un activo clave en el gobierno de Nicolás Maduro.
“Samark López fue un representante directo donde participó en una conferencia Zoom con seis personas”, dijo Tarek William Saab sobre la conversación.
También difundió otra grabación en la que Carlos Vecchio habla con Samarque López sobre el fracaso de la “Operación Gedeón” ocurrido el 3 de mayo de 2020.
“Se eligió a Samark López porque era el operador financiero de la mafia formada por El Aisami”, dijo el fiscal chavista.
Saab destacó que está en contacto con “nuevos actores” que ofrecerán “datos importantes” a la línea de investigación. También dijo que tenía evidencia de que las personas arrestadas en el caso PDVSA-Crypto habían ofrecido tratos y tratos para que las cosas siguieran funcionando.