El presidente de Sinatra-UCV, Eduardo Sánchez, considera que el gobierno de Nicolás Maduro “se burla” de la clase trabajadora. Criticó el aumento de las bonificaciones, no el salario mínimo, hecho que en su opinión significaba boicotear.
Eduardo Sánchez, Presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Universidad Central de Venezuela (Sinatra-UCV), confirmó este jueves 2 de mayo que el aumento del “ingreso mínimo integral indexado” no es más que una liquidación del salario mínimo nacional.
Desde el entorno de la UCV, Sánchez considera que la administración de Nicolás Maduro se está “burlando” de la clase trabajadora por este anuncio, aunque en los últimos días han dicho que no esperan un aumento salarial. Según él, no lo tiene todo porque tiene que hacer frente a unos 5,3 millones de jubilados; Dos y seis lakh de trabajadores de la administración pública para explicar los motivos de la medida.
“Usan una mentira a través de la retórica cuando lo único que están haciendo es desfinanciar el fondo de pensiones. La Seguridad Social sobrevive gracias a las contribuciones de los trabajadores. Si no hay salario, no hay contribuciones, y si esas contribuciones no existen, no hay manera de revitalizarlo de ninguna manera. Se les descuenta del salario y si no hay, no puede haber un plan de política habitacional y por lo tanto no hay vivienda”, aseveró.
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Además, Eduardo Sánchez cree que el Ejecutivo tiene una “posición baja” con los trabajadores porque, dice, se han aliado con el sector privado para obtener beneficios y no establecen relaciones económicas cualitativas y cuantitativas para un crecimiento positivo, sino que pagar salarios conduce a un estado de “pobreza”.
En ese sentido, aseguró que seguirán con su agenda reivindicativa e instó a las universidades del país a tener un debate interno para ver cómo afrontarán esta situación, ya que sin dinero la academia podría ejecutarse.
El dirigente gremial de la UCV aprovechó para condenar las agresiones realizadas por presuntos simpatizantes del oficialismo. Según él, esto no es más que “una expresión del miedo y del pánico de los trabajadores de la carretera”.
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