Miles de personas protestaron el sábado contra la perspectiva de que la extrema derecha llegue al poder en Francia en medio de una crisis política provocada por un avance inesperado en las elecciones legislativas.
“Pensé que nunca vería a la extrema derecha llegar al poder, pero ahora está sucediendo”, dijo Florence David, una mujer de 60 años que estaba aterrorizada al comienzo de las protestas en París.
El presidente Emmanuel Macron conmocionó al país al adelantar las elecciones legislativas previstas para el 30 de junio y el 7 de julio de 2027, apenas una hora después de la victoria de la ultraderechista Asamblea Nacional (RN) en las elecciones europeas.
Los analistas políticos consideraron la decisión una “apuesta arriesgada” en el contexto del ascenso de la extrema derecha en Europa, donde Francia es uno de los principales partidarios de Ucrania.
“Tenemos que decirle a todo el mundo que vote y luche cada día para evitar que RN gane”, dijo el delantero francés Marcus Thuram en rueda de prensa desde Alemania este sábado, días antes del debut de los blues en la Eurocopa.
Ante una nueva posible victoria del partido de extrema derecha, que ganó el 93% de los municipios franceses en las elecciones europeas, cinco sindicatos convocaron protestas este fin de semana.
“Nuestra democracia se acerca a un punto de inflexión”, advirtió Merylise León, líder del sindicato moderado CFDT.
Los temores de la RN en la marcha de París tomaron muchas formas: la defensa de la democracia, los derechos de los extranjeros, el colectivo LGBTI+.
Las protestas recuerdan las del 1 de mayo de 2002, cuando casi un millón de personas salieron a las calles contra el ultraderechista Jean-Marie Le Pen, que logró avanzar en la carrera presidencial.