Las agencias de rescate australianas dijeron el martes que se habían encontrado restos humanos dentro de un cocodrilo que atacó a un hombre mientras pescaba en el río Annan, en el noroeste del país, el sábado.
Desde la desaparición del turista han estado realizando operaciones de búsqueda las 24 horas del día. Según las autoridades, el hombre cayó desde un puente al agua infestada de cocodrilos.
Según un comunicado de la Policía Estatal de Queensland, “Se está llevando a cabo un proceso de identificación formal, pero se cree que los restos son los de un hombre de 40 años desaparecido en Nueva Gales del Sur (sur de Queensland)”.
El animal, descubierto el lunes, se encontraba en un arroyo cercano al lugar del ataque y medía 4,9 metros de largo. Posteriormente, proceden a sacrificarlo y encuentran restos humanos en su interior.
Hace menos de un mes, en la región fronteriza norte de Queensland, las autoridades mataron a otro cocodrilo después de que una niña de 12 años nadara en un arroyo en la comunidad indígena de Palumpa, a unos 357 kilómetros al suroeste de la ciudad de Darwin.
ataque de cocodrilo
Los cocodrilos de estuario (Crocodylus porosus), conocidos por sus ataques esporádicos y a veces mortales contra humanos, son depredadores temidos en Australia. Estos reptiles acechan a sus presas desde las orillas de ríos, lagos, playas y otros ambientes acuáticos, atacándolas con paciencia y sigilo.
Situada en el noreste de Australia, Queensland es famosa por sus maravillas naturales, como la Gran Barrera de Coral y la selva tropical de Daintree. Las principales ciudades de la región incluyen Brisbane, Cairns y Gold Coast, que atraen a turistas con sus playas y actividades al aire libre.
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Desde que el cocodrilo de estuario fue declarado especie protegida en 1971, su población ha aumentado significativamente. En la región norte, la población de estos reptiles ha aumentado de unos 3.000 ejemplares salvajes a unos 100.000 en la actual década, gracias a estrictas medidas de protección. Según los expertos, pueden medir hasta seis metros y son parte integral del ecosistema tropical del norte de Australia.