El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, ha vuelto a exigir la divulgación de las actas electorales de Venezuela y ha advertido de que Nicolás Maduro insiste en haber ganado sin poder comprobarlo, hecho que está demostrado. El país “podría entrar en una grave crisis”.
“Si Maduro insiste en que ha ganado y no quiere entender que, para la comunidad internacional, no hay presunción de resultados sin verificación, Venezuela podría entrar en una crisis grave. Todos estamos tratando de evitar que esto suceda”, Borrell dijo este lunes.
El jefe de la diplomacia europea compareció ante los medios en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander (Norte), donde habló esta semana sobre 'Co Vadis Europe?'
Borrell observó “claramente” que Maduro “se negó a mostrar el acta”. “Debería haberlo hecho, hay tiempo”, añadió, y enfatizó que “si no hay verificación de los resultados, no se pueden aceptar los resultados”.
“Sé que Maduro me ha dedicado palabras muy amables, no es la primera vez, pero tengo que recalcar lo mismo: si los resultados no se pueden verificar, no se pueden aceptar y, de momento, no son verificables”. Está bien, más bien, a través de la información que proporcionaron a la oposición”, dijo.
Después de las últimas elecciones presidenciales del 28 de julio, el Consejo Nacional Electoral (CNE) declaró ganador al actual presidente Nicolás Maduro con el 51,95% de los votos, frente al 43,18% del candidato mayoritario de la oposición, Edmundo. González Urrutia.
Pero la oposición no reconoció los resultados y el día de las elecciones publicó una copia del 81% de las actas que había recopilado y que le habrían dado la victoria.
Además, Borrell calificó como “el colmo de la ironía” que Maduro haya apelado a la Corte Suprema de Venezuela para “protegerlo”. “No sé qué va a emitir como sentencia porque su trabajo no es contar los resultados electorales”, dijo.
El alto representante instó a esperar a ver qué ocurre en los próximos días, aunque añadió que más de 2.000 personas han sido detenidas y “la persecución se está intensificando” y que cree que la comunidad internacional mantendrá sus exigencias de verificar los resultados. .