El partido gobernante de Argentina, La Libertad Avanza (LLA), está sumido en una crisis política que ya ha provocado acusaciones judiciales, denuncias cruzadas, escándalos, solicitudes de expulsión, derrotas judiciales e incertidumbre sobre el futuro de los asesores de algunos de sus miembros. La “estrella” del presidente Javier Milli.
Los conflictos terminaron esta semana después de que la oposición se hiciera con el control de la comisión bicameral de inteligencia y la Cámara de Diputados rechazara el decreto, que fue velado, por el que Miley quería destinar fondos millonarios reservados para la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).
Los extremos de convivencia entre el oficialismo derrotaron al parlamento, que ya estaba envuelto en una serie de conflictos.
El incidente más grave fue el de la diputada Lourdes Arrieta, quien luego de una reunión con sus compañeros legisladores, que estuvo llena de gritos y acusaciones mutuas, denunció al diputado Nicolás Mayoraz por violencia de género.
El problema surgió porque Mayoraj acusó a Arrieta de “conspiración” contra el gobierno. El diputado terminó llorando mientras aumentaban los rumores de que sería expulsado del bloque gobernante mientras acumulaba una serie de escándalos que afectaban a Miley.
Arrieta formó parte de una delegación de diputados oficialistas que se reunieron en prisión con represores que cumplen condenas por crímenes de lesa humanidad, cometidos durante la última dictadura militar (1976-1983). El rechazo se extendió ampliamente y se convirtió en una crisis política para el gobierno.
Desde que comenzó la polémica, Arrieta ha dicho que no sabe con quién fue a encontrarse porque nació en 1983 y desconoce a los perseguidores. Luego sorprendió con una insólita denuncia judicial en la que dijo que los legisladores que fueron a la cárcel junto con él debían ser investigados. La respuesta del fiscal Sergio Mola, que desestimó el caso, fue lapidaria.
“[Arrieta] “Crea una serie de consideraciones de carácter infantil, carentes de verosimilitud y ofreciendo un infantilismo que golpea hasta las inteligencias más dudosas”, advirtió el fiscal.
CAPUTO CONTRA LA HERMANA DEL PRESIDENTE
Santiago Caputo, asesor del presidente Milley, está atrapado en su propia crisis política. En las últimas semanas, el portal online La Politica ha afirmado que existe una pelea interna entre él y Corina Milli, hermana del presidente y actual secretaria general del presidente.
Según el medio, la relación se rompió y debido a ello, el asesor fue enviado de licencia mientras Miley tomaba la decisión. Al menos en los últimos meses, la salida de funcionarios del gabinete libertario ha sido constante.
“Carina y Santiago hoy sólo albergan odio hacia Sandra Petovello, quien la semana pasada recibió una llamada al orden de Milli. Los libertarios ven a la ministra de capital humano como un símbolo perfecto de incapacidad para gestionar, pero un funcionario admitió: 'Este complejo para “El gobierno no es el mejor momento para despedirlo'”, explicó el analista Ignacio Fidanza, en alusión a la supuesta pelea entre La Libertad Avanza.
El conflicto en el partido gobernante no es sólo interno sino que se extiende a las alianzas. Este es el caso, por ejemplo, de la creciente pelea entre el Presidente y la Vicepresidenta Victoria Villarreal, quienes no dejan de criticar las decisiones del gobierno.
Un gobierno como el de Javier Milli, sumido en la polémica y la arrogancia incluso antes de asumir el poder, sólo puede provocar una explosión. Puede llegar en cualquier momento.