A pesar de la perturbación de la paz, la economía del país apenas se ha visto afectada, destacó el Jefe de Estado.
El jefe de Estado de Venezuela, Nicolás Maduro, reveló que hace un mes “intentaron quemar” el país y atacaron el palacio de Miraflores, en Caracas, “con un grupo de 300 matones” pertenecientes al grupo de los autoproclamados “comanditos”. “
“Eran delincuentes a sueldo, la mayoría de los capturados tenían la droga Captagon en la sangre”, denunció este jueves el jefe de Estado en una reunión de trabajo con representantes de la banca, los seguros y los valores.
“En este momento (hace un mes) yo estaba aquí (…) por suerte la gran mayoría fueron identificados porque publicaban videos en TikTok, transmitían en vivo”, explicó.
El Presidente reveló que a través de tecnología de seguridad se ha identificado a extremistas violentos, quienes ya están siendo juzgados. “En el mundo dicen que son presos políticos. Vaya manera de hacer política quemando el hospital”, afirmó.
A pesar de las alteraciones de la paz causadas por líderes de extrema derecha, Maduro señaló que la economía del país estaba “casi estancada”.
“El 1 de agosto teníamos suministro completo en el país. “Te dice lo fuerte que es la economía y el conflicto político ya no se traslada a la esfera económica y la economía ya no es un campo de batalla de ideología, partido y política”, afirmó.