Las fuerzas de seguridad federales de Argentina reprimieron este miércoles a los jubilados durante una protesta contra el veto del presidente a un aumento salarial.
Los veteranos se reunieron frente al Congreso para marchar hacia la Plaza de Mayo, frente a la sede del gobierno de Buenos Aires.
El Ministerio de Seguridad desplegó una fuerte presencia policial en ambos puntos de reunión, y los soldados gasearon y golpearon a los manifestantes durante la manifestación.
Pasadas las 15:00 horas (hora local), los jubilados, junto con el movimiento social, iniciaron su marcha pacífica hacia la Plaza de Mayo, pero la Policía Federal y Gendarmería bloquearon el paso, generándose incidentes y posterior represión.
“No estaba haciendo nada, es injusto. “Estoy aquí para defender mis derechos”, dijo un jubilado al canal C5N después del ataque con gas pimienta.
La cartera de seguridad, encabezada por Patricia Bullrich, ha implementado polémicos protocolos antipiquetes, destinados a evitar cortes de carreteras durante las protestas. Esto no se logró, pero impidió que los jubilados llegaran a la zona de Casa Rosada, donde terminó la protesta.
27 personas resultaron heridas
Varios manifestantes resultaron heridos y tuvieron que ser atendidos por personal médico, entre ellos varios adultos mayores.
Según un funcionario del Sistema de Atención de Emergencias Médicas (SAME), al menos 27 personas, incluido personal de prensa, fueron atendidas con distintos grados de severidad. Asimismo, dos de las víctimas fueron trasladadas al Hospital Ramos Mejía de Buenos Aires.
También se llevaron a cabo marchas para rechazar la violencia estatal, luego de una represión por parte de jubilados en Calle el miércoles pasado, cuando la policía federal roció gas y golpeó con porras a los manifestantes frente al parlamento.