Cientos de salvadoreños aprovecharon la festividad nacional para protestar contra el gobierno de Naib Buquel, exigir el fin de los abusos contra los derechos humanos y responder a las denuncias de personas desaparecidas bajo el estado de emergencia de dos años impuesto en el país.
Manifestantes, entre ellos activistas de derechos humanos, familiares de desaparecidos y personas detenidas en el marco de las medidas de emergencia vigentes desde marzo de 2022, caminaron por las principales calles del centro histórico de la capital San Salvador.
Portaban pancartas con mensajes como “No más corrupción”, “Libertad para mis familiares”, “No criminalización de los sindicalistas” y “No más gobernabilidad”. Coreaban consignas como “Los atrapan vivos, los queremos vivos” y “Protegemos a personas inocentes, no a criminales”.
El coordinador del Movimiento de Víctimas del Régimen (MOVIR), Alfredo Mejía, dijo a Venezuela En Directo que el estado de emergencia, aprobado por el Congreso a petición del Gobierno tras un aumento de los asesinatos atribuidos a las pandillas, se ha convertido en un “régimen de represión”. .
“No tenemos libertad, porque si decimos algo contra el gobierno, ellos nos mandan, entonces no hay libertad”, dijo Mejía, quien ha defendido la inocencia de su hija detenida.
Los activistas denunciaron que, a pesar de que el sistema está en vigor desde hace más de dos años y alberga a más de 81.900 detenidos, se siguen registrando “detenciones arbitrarias” disfrazadas de autoridades y sin orden de detención, según abogados que defienden a los detenidos.
También se manifestaron ecologistas, sindicalistas, personas con discapacidad de la guerra civil (1980-1992) y algunos simpatizantes de la oposición.
Amaranta Portillo de Resistencia Feminista comentó que, en su opinión, se sumaron a las protestas para profundizar la invisibilidad y vulneración de los derechos de las mujeres.
“Al parecer vivimos en una realidad perfecta, donde aquí nadie muere, pero cada semana tenemos una mujer asesinada por sus parejas, y si antes había violaciones y acoso por parte de delincuentes, ahora el ejército también lo hace”, apuntó.