Cuando el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, expresó su solidaridad con su homólogo colombiano, Gustavo Petro, hace unos días, lo hizo frente a un enemigo común: la extrema derecha y el imperialismo estadounidense, en un esfuerzo por proteger a sus gobiernos progresistas. de nuestra región.
En el caso del Presidente de Colombia, como sucedió en nuestro caso, prácticamente desde que asumió el cargo el 7 de agosto de 2022, no han cesado los esfuerzos por sacarlo del Palacio de Nariño por diversas vías, entre ellas la más reciente a través de la Corte Nacional. Consejo Electoral, que, con el pretexto del supuesto exceso del límite de gasto en su campaña, intenta promover un juicio político en su contra.
El jefe de Estado de Colombia lo ha condenado repetidamente. El 1 de este mes, en su cuenta en Red X, dijo que “se están organizando para dar un golpe de Estado (…) desarrollando lo anunciado. Dependerá del pueblo que me ha elegido si el diseño oligárquico se hace realidad o si los derrotamos nuevamente (…) No será un voto parlamentario de nuestros enemigos para destituirnos. “Será una lucha popular”, afirmó.
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Al respecto, el periodista Luis Alfonso Mena, director del diario Parentesis de Cali, enfatizó que “el presidente no se ha quedado quieto, continúa la lucha jurídica para enfrentar este ataque y llama al pueblo a contraatacar. Este fin de semana se realizará un mitin popular nacional En apoyo a sus reformas y contra el golpe se realizarán manifestaciones masivas en todo el país”.
“Quienes promueven la supuesta autorización no son constitucionales, están encabezados por un señor llamado Prada (Álvaro), quien está siendo investigado por participar en un proceso completamente oscuro con falsos positivos junto a Álvaro Uribe. El Consejo Nacional Electoral está formado por parlamentarios fallidos que no lograron entrar al Senado ni a Diputados y sus partidos los designaron para calentar la banca por honorarios altísimos, pero son simplemente agentes de la oligarquía”, detalla el comunicador.
Mena, que también es abogado, insiste en que “el golpe viene desde hace tiempo, preparado por la extrema derecha. Comenzó después de la elección del Presidente. Últimamente se han revelado una serie de acontecimientos que intensifican este plan de la oligarquía y el eurebismo”.
Estos incluyen “tergiversar la propuesta del Presidente a los banqueros de invertir en la economía popular; Los medios de comunicación y los políticos de extrema derecha dijeron que estaba presionando y promoviendo la apropiación de ahorros, y con eso crearon pánico económico, lo cual es un crimen. Cuando fracasó, porque el presidente llegó a un acuerdo por 55 mil millones de pesos para darle crédito a la economía popular entre otros sectores, difundieron una falsa narrativa de que iba a hacer de 4 x 1.000 a 5 x en transacciones bancarias. 1.000, otra mentira que soltaron.”
“Ahora, a través del CNE, integrado por 'magistrados' que en realidad son políticos, la oligarquía mayoritaria intenta destituir al presidente por cruzarse en la campaña electoral, lo cual es falso, pero ellos establecieron esa narrativa”, afirmó.
Luis Alfonso Mena enfatizó que “el CNE no tiene la facultad constitucional ni legal para sancionar al presidente. Además, es inaceptable desde el punto de vista de derecho, porque esta investigación debió iniciarse 30 días después de la campaña electoral y más de dos Han pasado los años. Esto es una broma de la oligarquía, pero además, se refugian en la sala de consultas del Consejo de Estado, cuya composición es de mayoría uribesta, donde les dicen que pueden hacerlo.
La huelga de los camioneros: ¿un signo sedicioso?
Durante el paro de camioneros, que finalizó luego de cuatro días el pasado viernes 6, el presidente Gustavo Petro aseguró que se trataba de un paro comercial.
Luis Alfonso Mena, autor del libro Periodismo Independiente en Colombia, dice que, en realidad, “fue un lockout reflejado por los camioneros, financiado por la CIA, como el que ocurrió hace 51 años para derrocar al presidente de Chile, Salvador Allende.”
Sin embargo, según él, “el Presidente lo trató como un gran estadista y los beneficiados fueron los pequeños transportistas, el hombre común, las bases y los pulpos derrotados, los dueños de las grandes empresas intermediarias que se quedan con la mitad del flete y solo dales una pequeña parte. Entonces estos, en lugar de apoyar la huelga golpista de la oligarquía, ahora se van a asociar a reformas laborales para que se les reconozcan sus derechos y no sean explotados como antes”.
Después de una huelga de cuatro días en la que bloquearon caminos y autopistas, provocando incluso la muerte de una persona, el acuerdo levantado preveía un aumento de los precios del diésel en dos fases: una este mes y otra en diciembre.


“El ataque es desde diferentes frentes”
El periodista, historiador y abogado Luis Alfonso Mena sostiene que la sala consultiva del Consejo de Estado, ante la cual el CNE de su país presentó su solicitud, “no autoriza a nadie (a investigar al presidente). Las observaciones de esa cámara son meramente consultivas, ya que pueden ser respetadas o ignoradas.”
En este caso, “Bueno, los chicos del CNE dijeron que los aprobaron, lo cual es falso”.
Por ello, Mena insiste en que “estamos en presencia de una estrategia de torcerle el cuello a la misma ley burguesa que las élites han desarrollado durante más de 200 años, para intentar crear una matriz inestable contra el gobierno del presidente Petro. “
“Los ataques son desde diferentes frentes: legislativo, mediático, administrativo, electoral, para crear una narrativa de que el gobierno ha superado los límites (del financiamiento de campañas). Las acusaciones son inapropiadas, falsas, inoportunas y falsas”, señaló.
El experto enfatizó que “la única institución en Colombia que tiene la facultad de investigar al Presidente de la República es la Comisión de Investigación y Denuncias de la Cámara de Representantes, a la cual el CNE debe entregar todo lo que tiene en su contra. Esta comisión ( (que también está integrado por representantes de la oligarquía) quien sea La persona que presentará la presentación deberá ser nominada y, en su caso, deberá acudir a las sesiones plenarias de la Cámara y el Senado.

