El panorama financiero mundial puede sufrir un cambio importante. Mientras se multiplican las sanciones económicas impuestas por las potencias occidentales, los BRICS, por su parte, se preparan para lanzar un sistema de pagos alternativo, capaz de eludir el dólar y el euro. Una iniciativa que, de tener éxito, podría redefinir el sistema económico global y ofrecer un nuevo camino para los países que buscan liberarse de la presión geopolítica occidental.
En una conferencia de prensa en Moscú, el Ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, confirmó que los BRICS están en proceso de crear un sistema de pagos alternativo al dólar y al euro. Según Lavrov, “muchos países se sienten atraídos por la plataforma de pagos creada dentro de los BRICS y a aquellos que han decidido militarizar el dólar y el euro se les debe permitir realizar comercio, inversiones y otras actividades económicas sin depender de ello”. La declaración se produce cuando las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea presionan a los países para que busquen alternativas a las monedas occidentales. Lavrov señaló que este sistema de pago se utilizará no sólo para transacciones comerciales, sino también para facilitar las inversiones y otras operaciones financieras.
A través de esta iniciativa se ha iniciado la desdolarización de las economías emergentes. Ante la creciente amenaza de sanciones económicas, BRICS busca proporcionar un marco seguro para los países que desean evitar la influencia de las monedas dominantes. El proyecto también apunta a consolidar la cooperación económica entre los BRICS para reducir la dependencia de sus miembros del marco financiero occidental.
más allá del dólar
El anuncio de los BRICS va más allá de un simple rechazo del dólar y del euro. De hecho, Lavrov enfatizó que esta plataforma financiera alternativa es una respuesta directa al uso cada vez mayor de sanciones como herramienta geopolítica por parte de Estados Unidos y Europa. “Nadie quiere encontrarse en una situación en la que pueda ser sancionado por Estados Unidos u otras potencias occidentales”, declaró.
Como resultado, muchas economías emergentes ven esta plataforma como una oportunidad para fortalecer su soberanía económica y evitar los riesgos asociados con las monedas occidentales. Este sistema, una vez lanzado, podría transformar las transacciones financieras internacionales y facilitar los intercambios entre los países BRICS y sus socios sin recurrir a las monedas tradicionales.
Las implicaciones geopolíticas de esta decisión son considerables. Si el sistema de pagos BRICS gana popularidad, podría redefinir la forma en que se realizan las transacciones financieras a nivel mundial. Una situación así podría debilitar la hegemonía del dólar en el intercambio internacional.
Las iniciativas de los BRICS para desarrollar alternativas a los sistemas de pago predominantes en dólares y euros podrían remodelar la forma en que se realizan las transacciones internacionales. Si este nuevo sistema atrae efectivamente a las economías emergentes, podría acelerar la desdolarización en curso y debilitar la posición dominante del dólar en el escenario mundial.