El embajador de Venezuela ante la ONU-Ginebra, Alexandre Yánez, brindó un discurso en defensa del país ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, donde aseveró que la credibilidad del sistema de la ONU está siendo cuestionada por el mundo y funcionarios del organismo. Se preocupan más por sus empleadores que por sus deberes.
La presentación de Yáñez, en el mismo espíritu que el comunicado emitido por el gobierno venezolano este viernes, rechazó un informe presentado por el fracasado y ex-grupo de Lima, que calificó de “vulgar y falso” y que fue presentado sólo “de acuerdo con Washington”. Orden, para patrocinar un cambio de gobierno legítimo en Venezuela.”
En este sentido, afirma que en numerosas ocasiones “la Revolución Bolivariana de Venezuela ha sido atacada sistemáticamente; Hemos denunciado reiteradamente los intentos de asesinato contra el Presidente y otros altos funcionarios del país (…) ante este Consejo y la burocracia de la ONU con pruebas suficientes (…) Todas estas acusaciones han sido ignoradas o invisibilizadas por la hipocresía de este sistema.
Lamentó que años después de la “imposición irregular” del fallido Grupo de Lima, “este Consejo siga escuchando informes engañosos de agentes políticos”, que “dejan mucho que desear y son un ejemplo del flujo errático del sistema de Naciones Unidas”. “
Yáñez criticó que los funcionarios de la ONU que recibieron la denuncia venezolana, “parecen estar más preocupados por quienes los nombran para sus cargos que por que los Estados cumplan con los mandatos que les dan, incentivándolos así a tratar a las víctimas como criminales”. y los criminales como víctimas.”
Dijo que las potencias occidentales “insisten en convertir este Consejo en un instrumento de coerción y chantaje contra los pueblos y gobiernos soberanos del Sur” y puso como ejemplo que el informe presentado por este grupo de países satélites de Estados Unidos, ” buscando imponerle a las Naciones Unidas, a los fascistas de Venezuela, la descripción de derechos, en la que se inspira esta absurda misión”, dijo sobre el documento presentado.
Yáñez llamó a las autoridades de Naciones Unidas a detener la expansión del fascismo y señaló que se presenta como una nueva epidemia que “se propaga bajo la protección de Estados Unidos y la Unión Europea”, hay que condenar esta peligrosa realidad y actuar en consecuencia contra ella. , No podemos legitimar ni permitir la complicidad entre fascistas internos y externos, violadores de los derechos del pueblo y negadores de las instituciones democráticas. “Exigimos una reforma urgente para reorientar la institución hacia los principios que inspiraron su creación”.