Los aviones de combate israelíes continuaron bombardeando implacablemente todo el Líbano, incluidos los suburbios de la capital, Beirut, mientras el primer ministro decía que el ataque podría desplazar a un millón de personas.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dijeron que aviones de combate de la fuerza aérea “atacaron objetivos terroristas de Hezbolá en todo el Líbano con lanzadores de misiles dirigidos a Israel, almacenes de armas y edificios militares de la organización”, informó Telesur en su portal web.
Según los medios israelíes, actualmente se está investigando si Nader al-Jabin, el jefe de seguridad de la unidad 900 del movimiento chiita, fue el objetivo exacto del ataque.
En un segundo ataque este domingo contra la localidad de Jub Zain, en el valle de la Bekaa, Mohammed Dahruz, alto miembro de la organización egipcia Grupo Islámico, fue asesinado junto con su esposa y varios miembros de su familia, según informaron.
En otros lugares, 14 médicos murieron en dos días de ataques israelíes en todo el Líbano, dijo el Ministerio de Salud del Líbano en un comunicado.
“Las fuerzas de ocupación israelíes han aumentado sus ataques contra paramédicos y centros de salud en los últimos días. “Catorce paramédicos murieron en dos días como resultado de esta serie de ataques”, dice el comunicado.
Paralelamente a la destrucción israelí en el Líbano, continúan las operaciones militares Gaza. Las fuerzas israelíes atacaron hoy una escuela que sirve como refugio de la ONU. Al menos cuatro palestinos desplazados murieron y 15 resultaron heridos en el ataque, informó Al Jazeera.