Organizaciones políticas y sociales de América Latina y Europa exigieron este sábado al gobierno de Daniel Noboa en Ecuador la liberación del exvicepresidente de la nación, Jorge Glass, quien se encuentra recluido desde hace seis meses en una prisión de máxima seguridad.
este sabado Se formó un comité internacional Por la libertad del exfuncionario que ha reunido electrónicamente a figuras políticas y movimientos sociales para exigir que se emita un salvoconducto que permita su traslado a México, país que le otorgó asilo diplomático.
“Todos los días esperamos que George Glass, que vive bajo tortura y en condiciones inhumanas. No hay Estado de derecho en Ecuador”, señaló el expresidente de Ecuador Rafael Correa (2007-2017) en su discurso durante el evento.
Por su parte, el coordinador del Comité Internacional por la Liberación del Vidrio, Sacha Ellorenti, denunció que “el secuestro del ex vicepresidente sólo puede compararse con el de Luiz Inácio Lula da Silva o Julian Assange en este siglo. La situación es una rehén político.”
En la misma línea, Irene León, miembro de la Red de Intelectuales en Defensa de la Humanidad, coincidió en que “la persecución contra Glass continúa desde 2017, año en que Ecuador introdujo la ley, que es una operación de gran escala destinada a impedir una revolución civil”. “, citado por Prensa Latina. Advirtió.
Por su parte, el abogado de Glass, Aitor Martínez, destacó que el caso es uno de los más ejemplares del derecho latinoamericano y afirmó que el exvicepresidente “sufrió durante años una persecución brutal, ayudada por razones sin fundamento jurídico, que se han movilizado para mantenerlo en prisión”. .” “
La Corte Internacional de Justicia concluyó con la intervención de Norma Espinel, madre de Glass, quien reiteró: “Mi hijo es inocente. Siete años de calvario, (…) lo están matando. “Necesita un hogar”.
Integrantes del comité de liberación de Glass solicitaron este viernes a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) extender medidas cautelares al exvicepresidente.
El 5 de abril, fuerzas de seguridad ecuatorianas violaron la inmunidad de la sede diplomática mexicana en Quito, donde Glass se encuentra como asilo político desde diciembre de 2023.
El hecho concluyó con su detención y traslado a La Roca, el penal de máxima seguridad de la ciudad de Guayaquil, por órdenes del presidente Noboa.