La presidenta de México, Claudia Sheenbaum, mostró este viernes un vídeo que muestra cómo algunos gobiernos han pedido disculpas por atropellos cometidos contra personas vulnerables, en un intento de “animar” a la corona española para que se disculpe por los crímenes cometidos contra los pueblos indígenas. Mexicanos durante los años coloniales.
“Mañana a ver si España se anima a iniciar este proceso de disculpa pública a los indígenas de México”, dijo Sheinbaum en su sesión informativa matutina desde el Palacio Nacional de la Ciudad de México el 12 de octubre sobre el polémico tema.
El vídeo presentado por el presidente muestra una serie de reparaciones por diversos crímenes cometidos por diferentes países contra sus súbditos, como Japón pidiendo disculpas a China y Corea por las torturas cometidas contra sus pueblos, o Alemania ofreciendo el perdón a Israel. Crímenes de la era nazi.
Una disculpa pública por los crímenes contra la humanidad es una responsabilidad histórica que busca la reconciliación por agravios pasados.
Esta ley respeta la dignidad humana y reconoce el derecho a la verdad. Es el colmo de quienes reconocen la pérdida de otras naciones. pic.twitter.com/GEHHu0lz9M
— Gobierno de México (@GobiernoMX) 11 de octubre de 2024
Los ejemplos incluyen la disculpa de Italia ante Libia por los crímenes cometidos durante el colonialismo, la disculpa de Estados Unidos por infectar intencionalmente una enfermedad de transmisión sexual o la disculpa de Argelia por los crímenes cometidos durante la independencia de Francia.
“Estos ejemplos confirman que pedir perdón por agravios pasados permite resolver heridas históricas y libera tanto a quien perdona como a quien lo da”, se lee en el vídeo.
“Antes lo llamaban Día de la Raza, que no tiene nada que ver con la raza porque la raza no existe entre la gente… Ahora lo llaman Día de la Hispanidad”, se quejó el presidente sobre la celebración de la fecha en España.
Scheinbaum enfatizó el reclamo histórico heredado de su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, quien envió una carta al rey español pidiendo perdón a los indígenas de México por los abusos cometidos durante la conquista.
Debido a la falta de respuesta del Rey de España a tales solicitudes, el Presidente mexicano no invitó a Felipe VI a su toma de posesión, lo que creó un estancamiento diplomático entre los dos países.