A sólo dos días de ser elegido Presidente de Estados Unidos, el pasado jueves 7 de este año, el empresario y político Donald Trump refrendó ante la cadena NBC News la que fue una de sus promesas más repetidas: la deportación masiva de inmigrantes es ilegal.
“Realmente no tenemos otra opción. Hay personas que han cometido asesinatos, capos de la droga que han destruido el país y ahora van a regresar a esos países porque no se quedan aquí. No es una cuestión de costo”, subrayó.
Desde el principio se entendió que las principales víctimas de la medida serían los latinos, un grupo demográfico que, irónicamente, votó por él con un notable 45%, según la encuesta a pie de urna de NBC.
Magnett dio otra señal esta semana de que habla en serio sobre su amenaza a la política de inmigración al nombrar a un “zar de la frontera”, como lo describió literalmente cuando anunció, Tom Homan, quien estará “a cargo de todas las deportaciones”. de extranjeros ilegales en su país de origen”, como escribió en su propia cuenta social Truth.
En 2017, en la primera administración Trump, este expolicía ocupó el cargo de director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y propició la separación de miles de niños inmigrantes de sus padres en la frontera con México. Estados Unidos de América
caos
La amenaza de Trump, que parece que se materializará desde enero, podría ser un arma de doble filo, como han advertido expertos dentro y fuera del país.
“Si cumple su promesa y expulsa a unos 400.000 mexicanos cada año y cierra las empresas que hoy dan empleo directo e indirecto a unos dos millones de personas, el caos está garantizado”, advirtió Miguel Ángel, columnista del diario La Jornada de México.
“Estas son malas noticias para todos los inmigrantes”, anunció el martes pasado en el canal alemán DW Rodolfo Cruz Piñeiro, sociólogo director del Departamento de Estudios de Población del Colegio de la Frontera Norte en México, expresando su temor a que el nuevo orden de Donald Trump la política de inmigración.
El diario Washington Post advierte, por su parte, que “México no está preparado” para procedimientos de deportación de esta naturaleza.
El medio asevera que la nación azteca no cuenta con la infraestructura necesaria en la frontera para recibir la gran cantidad de inmigrantes deportados desde Estados Unidos.
recesión
Si Trump cumple su amenaza y deporta a más de 11 millones de inmigrantes, Estados Unidos se enfrentará a una recesión, según un estudio de la Coalición Estadounidense de Inmigración, citado por la agencia Venezuela En Directo.
Según este análisis, las deportaciones masivas podrían causar una caída anual del producto interno bruto de entre 4,2% y 6,8%, equivalente a una pérdida de entre 1,1 y 1,7 billones de dólares anuales, superando la Gran Recesión de 2007-2009, cuando se redujo en Se realizó el 4,3%.
Añadió que los estados más afectados por políticas similares serían California, Texas y Florida, claves para la economía del país, hogar de casi la mitad de los inmigrantes ilegales del país y uno de cada 20 residentes. Fuerza laboral, puede ser deportado.
Mientras tanto, las primeras protestas tuvieron lugar en Los Ángeles.
Comienza a formarse resistencia a las amenazas del presidente electo Donald Trump.
En Los Ángeles, una de las principales ciudades del estado de California, territorio arrebatado a México en 1848, ya tuvo lugar una de las primeras manifestaciones el 11 de este mes.
Según Los Angeles Times, unas 500 personas salieron a las calles de la ciudad para protestar contra el anuncio de Trump.
“Estamos aquí y no nos vamos. Si nos echan, ¡volveremos!
“Es muy triste para mí. Vine a representar a mujeres y personas sin documentos”, dijo Yolanda Velásquez, quien se encuentra en situación irregular, aunque vino de Tijuana, México, cuando tenía apenas un año y ahora tiene 30.
“Los 11 millones por los que tenemos que luchar son los indocumentados”, dijo a LAT Aurora Aguilera, quien llegó a Estados Unidos desde Michoacán hace 40 años y está documentada.
“No creen que ya están aquí y contribuyendo con millones de dólares a la economía”, añadió la mujer.
“Toda mi vida crecí con miedo a la inmigración, a abrir puertas, a ir a la escuela y a que la policía nos parara y nos deportara”, declaró Flor Martínez, de 29 años, una de las organizadoras de la protesta, cuya madre fue deportada a México en 2018. Precisamente por el presidente ahora electo en el primer mandato.
Esto exacerbará la escasez de mano de obra en Estados Unidos
Nan Wu, director de investigación del Consejo Americano de Inmigración (AIC), afirmó que la escasez de mano de obra se verá gravemente afectada si se cumplen las amenazas del presidente electo Donald Trump.
“Las deportaciones masivas exacerbarán la actual escasez de mano de obra en Estados Unidos, especialmente en industrias que dependen en gran medida de trabajadores inmigrantes indocumentados”, afirmó el investigador, citado por Telemundo.
Wu añadió que “despedir a tantos trabajadores en un período de tiempo tan corto aumentará los costos de construcción y retrasará la construcción de nuevas viviendas, haciendo que las viviendas sean aún menos asequibles en muchas partes del país”.
Esto se debe a que, según la AIC, el 14% de los trabajadores de la construcción en Estados Unidos son indocumentados.
El sector agrícola también se vería afectado: perder una cuarta parte de sus trabajadores “indocumentados” y de los que cultivan, cosechan y envasan alimentos “dañaría la producción nacional y aumentaría los precios de los alimentos”. Según el USDA (Departamento de Agricultura), el 41% de estos trabajadores eran ilegales en 2018, último año en el que se registró.