La policía federal de Brasil ha desmantelado una organización criminal formada por soldados entrenados por fuerzas especiales que planeaban asesinar al actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva para impedir su toma de posesión después de que gane las elecciones de 2022.
En la residencia del general Walter Souza Braga Neto se discutió un plan para asesinar al entonces presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva, al vicepresidente Geraldo Alcmin y al ministro de la Corte Suprema Alexandre de Moraes en 2022. Investigación de la Policía Federal de Brasil.
Braga Netto fue compañero de fórmula del ultraderechista Jair Bolsonaro en las elecciones de 2022 y anteriormente ocupó los cargos de Cámara Civil y Ministro de Defensa durante su gobierno.
Según el informe policial, la reunión tuvo lugar el 12 de noviembre de 2022, cuando Braga Neto ya no ocupaba el cargo ejecutivo. En esa reunión se presentó y aprobó el “Plan Operativo” para el funcionamiento de los llamados “Niños de Preto” o “Niños Negros”.
La investigación también reveló que los conspiradores planeaban asesinar al vicepresidente Geraldo Alcomin y al juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes. Según los medios locales, entre los detenidos se encuentran cuatro militares y un policía.
Según un comunicado policial, el complot contra Moraes incluyó un intento de asesinato con artefacto explosivo o veneno.
El ejército confirmó las detenciones del general de brigada retirado Mario Fernández, ex viceministro del gabinete de Jair Bolsonaro, junto con el teniente coronel Helio Ferreira Lima, Rodrigo Bejera de Azevedo y Rafael Martínez de Oliveira.
El juez Alexandre de Moraes aprobó la operación.
Aunque los agentes se encontraban en Río de Janeiro en el momento de su detención, no formaban parte del operativo de seguridad para la cumbre del G20 que se celebra en la ciudad, aclaró el ejército.