Un inmigrante venezolano en situación irregular en Estados Unidos fue sentenciado este miércoles 20 de noviembre a cadena perpetua sin libertad condicional por el asesinato de un estudiante, caso que Donald Trump impulsó durante la campaña electoral como parte de su retórica antiinmigración.
“¡Justicia para Laken Riley!” La sentencia fue anunciada una vez en su red social La Verdad, aunque aún no se conoce la sentencia.
“Es hora de asegurar nuestras fronteras y expulsar a estos criminales y matones de nuestro país para que nada como esto vuelva a suceder”, añadió.
Así, equipara delincuencia e inmigración ilegal, como lo ha hecho durante toda la campaña, a pesar de que las estadísticas oficiales de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) indican que los delitos violentos han disminuido en el país.
Un juez del sureño estado de Georgia declaró culpable al venezolano José Antonio Ibarra, de 26 años, de diez cargos, entre ellos agresión agravada y asesinato con intención de violar a Riley, una estudiante de enfermería de 22 años.
#rotura El jurado declaró a José Antonio Ibarra culpable de todos los cargos de asesinato de Laken Riley. Ibarra recibió la sentencia sin comentarios. pic.twitter.com/rrTCzxOY3h
— María Alesia Sosa (@MariaAlesiaSosa) 20 de noviembre de 2024
Lo condenó a cadena perpetua sin libertad condicional.
El cuerpo de la estudiante de enfermería, que salió a correr una mañana de febrero, fue encontrado en una zona boscosa cerca de un lago en el campus de la Universidad de Georgia.
Antes de la sentencia, hablaron varios familiares de la víctima, entre ellos su hermana menor Lauren Phillips, quien dijo que ahora “vive en un estado constante de miedo, ira y tristeza” y describió al acusado como un “depredador brutal”.
“No me envía un mensaje de buenos días o un TikTok divertido o un Snapchat tonto todos los días”, dijo Phillips entre lágrimas.
El condenado, que no habla inglés con fluidez, siguió el juicio y el veredicto con la ayuda de un traductor.
Tienes 30 días para apelar.
El caso dio un giro político cuando los republicanos exigieron al presidente demócrata Joe Biden “disculparse” ante la familia de Laken Riley por no implementar políticas más duras en la frontera con México.
Durante la campaña electoral, Trump criticó duramente a los inmigrantes en situación irregular. Los acusó de “envenenar la sangre” del país y los comparó con “animales” y “monstruos”.
El republicano ha prometido tomar medidas enérgicas contra los cruces fronterizos y llevar a cabo deportaciones masivas después de asumir el cargo en enero.
Nombró a Tom Homan, un funcionario de inmigración de línea dura, como su “zar fronterizo”.