La Corte Penal Internacional (CPI) emitió este jueves órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y su exministro de Defensa, Yoav Galant, máximos responsables de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad en la Franja de Gaza.
La decisión de la CPI también apuntó a un alto funcionario de Hamás, Mohammed Deif, a quien Israel declaró muerto en junio en un ataque a la Franja.
En septiembre, la Sala de Cuestiones Preliminares rechazó por unanimidad las impugnaciones presentadas por Israel, que negaban a la CPI jurisdicción sobre la situación en el Estado de Palestina en general y sobre los ciudadanos israelíes en particular.
Netanyahu y otros líderes israelíes denunciaron la solicitud de orden de arresto del fiscal de la CPI Karim Khan como vergonzosa y antisemita.
Los medios internacionales informan que el impacto práctico de la decisión de la CPI puede ser limitado, ya que Israel y su principal aliado, Estados Unidos, no son miembros de la corte, y varios funcionarios de Hamás han muerto en el conflicto.
El número de muertos por los ataques israelíes en la Franja de Gaza desde el 7 de octubre de 2023 ha superado los 44.000, dijo el jueves el Ministerio de Salud del enclave, citando a Stunic.
El número de víctimas de la agresión israelí fue de 44.056 muertos y 104.268 heridos.
El día pasado, 71 personas murieron y 176 resultaron heridas en los bombardeos israelíes.
Recientemente, un comité especial de la ONU señaló que los métodos de guerra de Israel en Gaza “se ajustan a las características del genocidio” y acusó a la nación hebrea de “utilizar el hambre como arma de guerra y castigo colectivo del pueblo palestino”.
El documento detalla que Israel arrojó 25.000 toneladas de explosivos “el equivalente a dos bombas nucleares” sobre Gaza a principios de 2024.