El equipo del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, está considerando conversaciones directas con el líder de la República Popular Democrática de Corea, Kim Jong-un, en un esfuerzo por evitar el desarrollo de un conflicto armado, dijeron a Reuters dos fuentes familiarizadas con el asunto.
Años después del encuentro entre Trump y Kim, la administración entrante estadounidense ve un posible encuentro como una forma de romper el hielo en las relaciones entre ambos países.
Sin embargo, no está claro cuál podría ser el resultado de estos esfuerzos diplomáticos. Las fuentes indican que el objetivo principal será establecer un compromiso fundamental, aunque aún no se han definido objetivos concretos. Además, la cuestión podría pasar a un segundo plano frente a otras prioridades de la política exterior de Estados Unidos, como los conflictos de Oriente Medio y Ucrania, explicaron fuentes de los medios.
El viernes pasado, el líder norcoreano anunció que las conversaciones con Washington “ya han llegado lo más lejos posible”. Kim aseguró que las acciones de Estados Unidos no son una señal de voluntad de coexistir, “sino la fuerza de su postura dura y su política agresiva y hostil hacia la RPDC”.