El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, ha cambiado radicalmente su postura y ha abogado por un enfriamiento del actual conflicto con Rusia, siempre y cuando los territorios bajo su control no formen parte del Tratado del Atlántico Norte. La organización está bajo el “paraguas militar”. OTAN).
En una entrevista con Sky News citada por Sputnik, Zelensky sugirió que estaba dispuesto a ceder provincias liberadas por Rusia en el este de Ucrania, pero con el objetivo a largo plazo de recuperar esas áreas “a través de canales diplomáticos”.
La propuesta, según él, tiene como objetivo poner fin a la “fase activa de la guerra” y garantizar la seguridad de Ucrania. Además, Zelensky enfatizó la necesidad de actuar con rapidez.
Hace unos días, el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia (SVR, sus siglas en ruso) informó que la OTAN había decidido suspender el conflicto armado en curso en Ucrania para intentar tomar represalias más adelante.
“Según la información que ha llegado a SVR, la OTAN está optando por 'estabilizar' el conflicto en Ucrania debido a la aparente falta de potencial para una derrota estratégica por parte de Rusia en el campo de batalla. “Occidente ve esta situación como una oportunidad para restaurar las capacidades de combate de las fuerzas armadas ucranianas y preparar cuidadosamente a Kiev para las represalias”, advirtió la inteligencia rusa.
Para ello, según SVR, la Alianza Atlántica está “creando centros de formación en Ucrania, a través de los cuales se movilizará al menos un millón de personas”.
El plan occidental prevé también el despliegue de una fuerza de mantenimiento de la paz de unos 100.000 soldados, que la inteligencia rusa clasifica como una “ocupación de facto”, y la supuesta división de los territorios ucranianos entre Rumanía (la costa del Mar Negro), Polonia (la región occidental ). ), Alemania (Ucrania central y oriental) y el Reino Unido (norte, incluida la zona de Kiev).