Es casi un hecho que el plan de paz propuesto por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, para resolver el conflicto en Ucrania no incluye la adhesión del país eslavo a la OTAN, informó el miércoles un análisis de Reuters de su discurso. Entrevistas con asesores y personas cercanas al futuro presidente.
Esta interpretación también indica que Kiev, la Unión Europea (UE) y algunos legisladores estadounidenses pueden oponerse a la propuesta del futuro jefe de Estado, aunque ello no implica un cambio en su política al respecto.
El medio detalla que el equipo de Trump ha esbozado tres propuestas básicas para Ucrania, entre ellas la renuncia a la membresía en la OTAN y las concesiones territoriales. Estas ideas han sido compartidas por el teniente general retirado Keith Kellogg (nominado por Trump para enviado especial para Ucrania y Rusia), el vicepresidente electo James David Vance y el exdirector de Inteligencia Nacional Richard Grenell. El objetivo central de estas propuestas será animar a Moscú y Kiev a entablar negociaciones.
Vance, por ejemplo, rechaza la entrada de Ucrania en la OTAN, pero insiste en la necesidad de crear una zona desmilitarizada a lo largo de la frontera con Rusia. Grenell favorece la creación de “regiones autónomas” y también sugiere que la entrada de Ucrania en la alianza no redunda en interés de Estados Unidos.
Kellogg, por su parte, sugirió aumentar la ayuda a Ucrania si Rusia se negaba a negociar. Sin embargo, detalló que podría provocar una reacción negativa en el Congreso estadounidense, donde algunos de los aliados más cercanos de Trump se oponen a una financiación adicional para Kiev.
Zanahorias y palos
Según el análisis, Trump podría adoptar una estrategia de “palo y zanahoria”, según la cual, si Vladimir Zelensky obstruye las conversaciones, Estados Unidos podría retirar su apoyo a Kiev. Por otro lado, si el líder ruso Vladimir Putin no acepta dialogar, el apoyo de Estados Unidos a Ucrania aumentará. Sin embargo, las posibilidades de un acuerdo de paz dependerán en gran medida de la comunicación directa entre Trump, Zelensky y Putin, según los asesores del presidente electo.
Señaló que la iniciativa de Trump probablemente enfrentaría resistencia por parte de Zelensky, quien ha destacado la entrada de Ucrania en la OTAN como un aspecto fundamental de su propio “plan de victoria”. Además, Trump puede tener menos recursos para presionar a Kiev para que participe en las conversaciones, ya que los aliados de Ucrania ya han expresado su intención de aumentar la ayuda militar, mientras que el actual presidente estadounidense, Joe Biden, está enviando armas.
Por su parte, Rusia ha señalado repetidamente que una condición importante para la paz es la retirada completa de las tropas de Kiev de los nuevos territorios rusos, así como su reconocimiento, Crimea y Sebastopol, como súbditos de la Federación Rusa.