Según expertos electorales, la participación de organizaciones con objetivos políticos en las elecciones está bajo la plena consideración de los poderes electorales en Venezuela. Así se indica que Se desconocen los criterios legales Permitir o no permitir la admisión de un partido para que pueda nominar candidatos, como lo demuestra Elecciones presidenciales del 28 de julio.
Tales “desórdenes” llevaron a la necesidad de regular la legitimidad de los partidos políticos en los reglamentos electorales, con criterios claros, lo que fue planteado ante la Comisión de Diálogo. Consejo Nacional (AN) 2020 que aborda las reformas electorales prometidas por el chavismo antes de que finalice la sesión del segundo mandato (15 de diciembre).
Muchas otras propuestas aún están pendientes, a saber Representación proporcionalel Igualdad de géneroLa actualización del registro electoral, entre otras cosas, podría pasar el filtro mayoritario del chavismo e incluir cambios.
El propósito del chavismo
En cuanto a los partidos políticos, el Presidente de la AN 2020, Jorge RodríguezAl anunciar el proceso de reforma, se afirmó un objetivo claro: que los partidos políticos no pudieran nominar a “fascistas” para cargos electos.
El objetivo se refleja en el artículo 9 ya aprobado Ley Bolívar que castiga a quienes soliciten o se considere que promueven sanciones internacionales contra el gobierno de Nicolás Maduro, con impedimentos para aspirar a cargos de elección popular. Lo que se espera que se enfatice son los cambios en el proceso electoral (LOPRE) y las leyes sobre partidos políticos, reuniones públicas y manifestaciones.
El diputado de 2020 y miembro de la comisión de diálogo, Aníbal Sánchez (El Cambio), advirtió que el proceso de reforma está paralizado, ya que la instancia no ha sido convocada desde inicios de noviembre, cuando concluyó una consulta nacional sobre los cambios, por lo que la Las reglas electorales estarían vigentes antes de finales de 2024. Expresó dudas sobre si los cambios estarían listos. Sin embargo, le preocupa que, como ocurrió con la ley de Bolívar, el chavismo se guarde otra carta bajo la manga.
¿Qué pasó con los partidos en las últimas elecciones?
él Movimiento en el socialismo (MAS), Generación Independiente (Pueblo), Convergencia y Partido Unión y Entendimiento (Puente) no pudieron postular candidatos para las elecciones presidenciales del 28 de julio porque sus cédulas fueron canceladas ante el Consejo Nacional Electoral (CNE).
El organismo electoral no explicó la medida, pero extraoficialmente se conoció que se tomaron en cuenta los votos recibidos en las elecciones regionales de 2021; Es decir, al ser inferior al 1% en el caso de las empresas mencionadas, quedaron excluidas. Sin embargo, Somos Venezuela, organización oficialista, obtuvo 49.000 votos en las elecciones regionales de 2021 y no fue descalificada por el organismo electoral.
Según el artículo 25 Ley de Partidos PolíticosLas organizaciones nacionales renovarán en el año en que comience cada período constitucional su lista de afiliados inscritos en un porcentaje del 0,5% para su constitución.
Además, los partidos que hayan obtenido el 1% de los votos emitidos en las elecciones nacionales sólo deberán presentar prueba de voto debidamente certificada por el organismo electoral respectivo. Esta regla también se aplicará a los equipos regionales.
Criterios políticos y no legales.
La medida que afectó al MAS también afectó al Movimiento por Venezuela (MPV) de Simón Calzadilla, pero luego y como “fruto” de las negociaciones, se le permitió participar y postular la candidatura de un opositor. Edmundo González Urrutia.
Esta decisión, de hecho, se ha sumado a aquella tarjeta de barro La nominación de candidatos para las elecciones de 2021 y 2024 también se permitió mediante negociaciones, aunque esto fue descartado en 2018 por participación en una doble militancia, lo que refleja el uso de “criterios políticos” a la hora de decidir la participación de los partidos en las elecciones.
“El criterio para ilegalizar o legalizar a los partidos políticos para las elecciones presidenciales del 28 de julio fue realmente desastroso, porque el CNE mezcló criterios que nunca estuvieron claros. “Solicito votar primero, en otros casos aplico el proceso de validación, en otros es sólo una decisión administrativa que nunca se explica”, dice Eugenio Martínez, director de Fotoscopio.
En ese momento, el MAS indicó que no tenía conocimiento de ningún procedimiento realizado para tomar una decisión además de la resolución del CNE sobre su inelegibilidad para las elecciones presidenciales. En abril, Kamala Shamiana anunció su apoyo al candidato presidencial Edmundo González Urrutia. Extraoficialmente se dijo que se ofreció incluir la tarjeta a cambio de respaldar a otro candidato, pero la organización declinó.
Martínez recordó que no era un tema exclusivo del 28 de julio sino que se venía arrastrando desde 2016, cuando a través del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) se cambiaron las reglas para la legalización de partidos políticos.
TSJ cambió todo en 2016
Ese año, el TSJ ordenó al CNE tomar el control Verificación de salario registrado Para organizaciones con objetivos políticos, implementar sistemas de seguridad electrónicos e informáticos, como recolectores de huellas dactilares para verificación de firmas de personas registradas en partidos políticos.
La Corte Suprema estableció que la renovación automática del registro de un partido se adelanta sólo si logra obtener el 1% de los votos válidos emitidos en al menos 12 estados el 6 de diciembre de 2015 (elecciones parlamentarias donde ganó la oposición).
Para entonces, los únicos partidos políticos nacionales que cumplían con este concepto eran la MUD y el Partido Socialista Unido de Venezuela (psuv) el proceso de ratificación, con muchos obstáculos para las organizaciones políticas, como el poco tiempo para recoger firmas, dejó sólo 17 de 67; 12 organizaciones oficialistas y 5 de oposición.
Dos partidos de oposición están fuera
La retirada fue en los toldos. Juicio primero (PJ)y voluntad popularPor lo que posteriormente el TSJ intervino en 2020 para imponer directivas que afectan al gobierno nacional junto con otras organizaciones políticas. De este modo volvieron a incluir sus tarjetas en la papeleta electoral tras las elecciones parlamentarias de 2008.
“Desde 2016 se han cumplido varios procesos de legalización, que conllevan avances y retrocesos, se activan o invalidan partidos políticos hasta llegar al absurdo administrativo del 28 de julio, que mezcló distintos criterios para invalidar o legalizar partidos políticos. La anulación del MAS fue un caso simbólico, siguiendo criterios distintos a la legitimidad del PJ, una vez que se entregó su control a José Brito y se le permitió participar en las elecciones presidenciales”, señaló Martínez.

¿Cómo afecta la no declaración de resultados el 28 de julio?
Si el criterio utilizado por el CNE es el de votos previos, entonces cada organización política necesitaría saber cuántos votos recibió en las elecciones presidenciales del 28 de julio. Si consideramos que Nicolás Maduro y Edmundo González Urrutia captaron los votos, más de una de las 37 organizaciones que participan en las elecciones de 2025 deberían ser válidas.
A la fecha el CNE aún no ha publicado el acta de votación Los resultados de las elecciones presidenciales son mixtos. Si esto no sucede de cara a las elecciones de 2025 y si no se hacen reformas, señaló Aníbal Sánchez, se privará del criterio político y la jurisprudencia del TSJ, así como de las decisiones del órgano electoral al respecto.
“En aspectos como no permitir la doble militancia, el uso de recolectores de huellas dactilares para recoger manifestaciones de voluntad y el 1% de votos requerido para que las entidades participantes eviten la renovación al inicio de un nuevo proceso constitucional. Punto, al obtener al menos el 0,5% en 12 de las 24 entidades del país será reemplazada; aún queda la duda de si se podrá complementar en los casos en que no se cumplan los requisitos”, dijo Sánchez. dicho
Señaló que para 2025, el CNE deberá convocar a la conformación de nuevos órganos con fines políticos y sortear los servicios electorales (miembros de mesa) antes del primer trimestre del año, coincidiendo con las elecciones municipales, regionales y parlamentarias. , que ha propuesto Maduro, se hará por separado a lo largo del año.
El diputado y experto electoral agregó: “Esto va en contra de la exigencia de que los partidos se financien de alguna manera, regularizando un ecosistema de partidos que no recibe mucha atención porque mostrará la debilidad y la realidad de los actores políticos actuales”.
Ciegos en 2025
Martínez recordó que El CNE ya no se rige por la votación de procesos anteriores para declarar legal o no a un partido político.Pero en otros casos aplica los votos de las últimas elecciones similares, por ejemplo, de diputados a diputados, o sólo toma decisiones “administrativas” que cumplen otros criterios.
“No hay guía para las elecciones de 2025 Saber qué criterios se utilizarán para verificar o no la validez del registro de partidos políticos o qué criterios se utilizarán para el ingreso de nuevas fuerzas políticas”, agregó Martínez.
No sabía si la comisión de diálogo tomaría una decisión al respecto, pero comentó que en cualquier caso era necesario. Volver a los estándares anteriores a 2016 Y después de reformar las reglas electorales, hacerlas cumplir correctamente.
“Si una fuerza política deja de participar en dos procesos electorales consecutivos, deberá completar su proceso de reinscripción ante el CNE. La continua falta de participación en las elecciones dará lugar a la invalidación. Si obtiene menos del 1% del voto nacional total, también tendrá que ser renovado. Al menos se recomienda volver al orden medianamente lógico que existía hasta 2015 porque después de 2016 el proceso se volvió un caos, no hay criterios claros sobre cómo renovar la legitimidad de los partidos, el tema de la doble militancia, entre otras cosas. “Cuestionó Martínez.