El Ministerio de Defensa ruso afirmó este miércoles que las fuerzas armadas han lanzado una ofensiva masiva contra las instalaciones de infraestructura energética de Ucrania que apoyan las operaciones del complejo militar-industrial.
A través de su canal Telegram, la agencia detalló que la operación se llevó a cabo con la ayuda de armas de precisión de largo alcance y drones de ataque, lo que resultó en “alcanzar todos los objetos”.
El ministerio añadió que en las últimas horas el ejército destruyó dos depósitos de municiones y uno de equipamiento técnico-militar de las fuerzas ucranianas, también destruyó emplazamientos de mercenarios extranjeros y servicios de seguridad de Ucrania y “dañó la infraestructura de los aeródromos militares”. 140 áreas de densidad de soldados enemigos y equipo militar.”
La organización presentó un resumen de diversas acciones llevadas a cabo por las Fuerzas Armadas rusas en diferentes regiones e indicó que los ataques de formaciones opositoras fueron repelidos.
“El sistema de defensa aérea disparó cinco sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes Humer de fabricación estadounidense y 119 vehículos aéreos no tripulados del tipo avión”, dijo.
Una fuerte respuesta
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, dijo a una cadena de televisión local que la respuesta de su país será cada vez más “fuerte” ante los continuos ataques de Ucrania contra zonas civiles.
“En cuanto a los continuos ataques terroristas del gobierno de Kiev contra edificios residenciales, hospitales, clínicas, tiendas y lugares de reunión públicos, ¡son absolutamente inaceptables! Estos actos constituyen una violación directa de todas las convenciones antiterroristas y de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU”, afirmó la canciller citada por Tas.
Advirtió que una continuación de tales acciones “provocaría reacciones cada vez más fuertes y asertivas”.
Lavrov también expresó su frustración porque prácticamente ningún país occidental se ha pronunciado para condenar los ataques de Ucrania, a pesar de que Rusia publica periódicamente pruebas de cómo sus fuerzas neutralizaron instalaciones asociadas con la preparación y ejecución de operaciones militares de Ucrania.