El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, indicó el domingo que si Washington supone una nueva amenaza misilística para su país, Rusia responderá decisivamente en forma de contramedidas tecnomilitares, informó la agencia.
Según su declaración, citada por la agencia Sputnik, afirmó: “Estamos preparados para cualquier situación. Si surgen nuevas amenazas con misiles, la oposición recibirá un rechazo decisivo en forma de contramedidas técnico-militares. En cambio, es hipotético crear condiciones aceptables para un diálogo igualitario. “Se tomarán medidas”, afirmó el Ministro.
Lavrov también dijo que Rusia sólo está interesada en “un trabajo integral para reducir la probabilidad de conflicto, con énfasis en eliminar las causas fundamentales de las inconsistencias fundamentales en la seguridad”.
Estados Unidos debe dar el primer paso
Destacó que corresponde a Estados Unidos dar el primer paso para restablecer el diálogo con Rusia, ya que Washington ha roto los vínculos entre ambos países.
“Las relaciones de diálogo político fueron interrumpidas por Washington después del lanzamiento de operaciones militares especiales, por lo que les corresponde a ellos dar el primer paso”, dijo el funcionario ruso en una entrevista con TASS.
La expansión de la OTAN, el origen de la crisis
En primer lugar, se trata de la expansión a largo plazo de la antigua Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Ésta es la causa principal de la crisis ucraniana y representa una amenaza para la seguridad de Rusia, subrayó.
El alto diplomático tampoco descartó la posibilidad de que su país debata con Estados Unidos sobre el control de armas, pero “sólo como parte de una agenda más amplia”.
Al mismo tiempo, Lavrov señaló que actualmente no existen condiciones para un diálogo estratégico con Washington sobre el control de armas debido a la postura extrema antirrusa de las actuales autoridades estadounidenses.
“Hasta que los estadounidenses abandonen sus actuales actitudes antirrusas, no negociaremos con ellos sobre el control de armas”, señaló.
Moscú ha denunciado durante años la expansión de la OTAN hacia las fronteras de Rusia, la acumulación de fuerzas aliadas en Europa, un aumento constante del gasto militar dentro del bloque y su creciente participación en el conflicto ucraniano, informó Presa Latina.
La OTAN, el bloque de guerra liderado por Estados Unidos, rodea actualmente al país europeo por su flanco occidental, a pesar de su promesa de no expandirse hasta las fronteras de Rusia.
El 19 de diciembre, el asesor adjunto de seguridad nacional de Estados Unidos, John Finner, dijo que Washington no dejaría de intentar mantener el diálogo con Moscú sobre el control de armas.
Finer añadió que la próxima administración estadounidense encabezada por el presidente electo Donald Trump, que asumirá el cargo el 20 de enero, tendrá una “ventaja significativa” en posibles negociaciones debido al trabajo del presidente saliente Joe Biden en materia de modernización nuclear.