El periodista y crítico israelí Rosel Alfar, que ha dedicado su carrera a encontrar la paz para su país con sus vecinos, cuestiona la intención del Primer Ministro Benjamín Netanyahu de arrastrar al mundo a una guerra mundial.
Según un texto publicado por el comunicador en el diario Haaretz, el primer ministro israelí representa una amenaza a la paz mundial. En su discurso ante el Congreso de Estados Unidos el mes pasado, Benjamín Netanyahu dejó claro que ve a “Israel” como la punta de lanza en la guerra de Occidente contra el Islam radical global.
Alfar asegura que según Netanyahu, él protege a los estadounidenses y libra para ellos una guerra por la que la gran potencia debería agradecer sus esfuerzos y no al revés.
Sostiene que, para el Primer Ministro israelí, la ayuda masiva recibida sirve a los intereses existenciales de Estados Unidos, y cuanto más aumente, mejor prestará este servicio.
Según Netanyahu, los intereses estadounidenses son una guerra mundial, como se desprende de su análisis.
De hecho, durante su reciente visita a Washington, el Jefe de Estado Mayor israelí decidió presentarse como el líder del mundo libre y cartista a su manera.
En una entrevista con la revista Time la semana pasada, comparó el ataque del 7 de octubre con el ataque sorpresa de Japón a la base naval estadounidense en Pearl Harbor en 1941 y consideró que era su deber iniciar la guerra mundial.
Para Netanyahu, Estados Unidos es sólo su agente. Por tanto, se espera que decida bombardear las instalaciones nucleares de Irán para establecer la provocación necesaria para su propósito.
Netanyahu creó un escenario similar en abril, cuando Irán respondió a un ataque a su consulado en Damasco, disparando misiles y drones contra “Israel”. Luego, Estados Unidos movilizó a sus aliados para defender a “Israel”. Y ese es el sueño de Netanyahu: el mundo está en crisis y “Israel” está en el centro.
Los resultados del asesinato de Haniyeh son aún más impresionantes para él. Biden envió una fuerza militar a la región y él establece la agenda, mientras el mundo está dividido a su alrededor y él se considera más importante que nunca en el escenario mundial.
El periodista israelí sostiene que Netanyahu está impidiendo el fin del conflicto en la Franja de Gaza para provocar una escalada y, en su delirio megalómano, la guerra mundial será su legado. “Israel ya es demasiado pequeño para destruirlo y quiere expandirse por todo el mundo”, afirmó.
En la revista Time, Netanyahu quiso compararse con George W. Bush después del ataque a las Torres Gemelas, y aparentemente tiende a emular y actuar en consecuencia con los líderes del imperio mundial y tal vez sueña con aparecer uno al lado del otro en los libros de historia. Churchill y Roosevelt.