Una mujer causó pánico en una playa de Ibiza cuando empezó a actuar de forma errática como si hubiera sufrido.
Todo transcurría con normalidad en un día soleado cuando los gritos de la mujer alertaron a los bañistas. La mujer no sólo gritó sino que empezó a bailar y a hacer extraños movimientos frenéticamente. En medio de todo lo que decía de manera inteligible se podía escuchar: “Ayúdame, estoy sufriendo”.
Ante esta situación, los habitantes del sitio se alejan y lo miran desde una distancia prudente. Unos minutos más tarde un hombre se acerca para intentar calmarlo, pero este se levanta e intenta atacarlo, por lo que el hombre tiene que irse.
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Los agentes de policía de San Antonio llegaron momentos después. Un primer agente se acercó e intentó hablar con ella, pero la mujer le arrojó arena y piedras en repetidas ocasiones.
A medida que la situación se sale de control, los dos agentes corren hacia él y logran inmovilizarlo. Agentes uniformados lo trasladaron en una ambulancia a un centro de salud mental donde evaluarían su estado.