El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, renovó hoy el “estado de emergencia” por 30 días a partir del 2 de julio en seis provincias y un cantón (municipio) debido a “graves disturbios internos”, afectados por la violencia criminal. a grupos del crimen organizado.
Mediante decreto, Noboa ordenó renovar medidas en las provincias de Los Ríos (oeste), Guayas (suroeste), Santa Elena (suroeste), Manabí (noroeste) y El Oro (suroeste), así como en la provincia amazónica de Orellana. y el cantón (municipio) Camilo Ponce Enríquez, en la provincia de Ajuay (Sur).
“La decisión nos permitirá fortalecer las estrategias y medidas implementadas por la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas para proteger a nuestros ciudadanos y la seguridad en general; así como el orden público y la seguridad interior”, dijo la presidencia en un comunicado.
Por otro lado, el presidente decidió que desde las 10:00 hasta las 17:00 hora local ordenó a 19 cantones (municipios) y una parroquia, debido al aumento de la delincuencia y la inseguridad. mantener
La Presidencia indicó que “bajo un riguroso análisis técnico, la declaración de emergencia se ha concentrado geográficamente para atender de manera más eficiente las necesidades de seguridad de estas regiones”.
El decreto presidencial establece que las actividades violentas y otros modus operandi de los grupos armados organizados en estas zonas “permanecen”, por lo que es necesario mantener el mismo régimen excepcional.
Desde el pasado 9 de enero, Ecuador se encuentra en medio de un “conflicto armado interno” que el presidente Noboa declaró en contra de la clasificación que hace el país de 22 bandas del crimen organizado como “terroristas”, tras un aumento de la violencia.
Bajo esta medida, se desplegaron fuerzas militares en las calles y zonas de conflicto para neutralizar las actividades de estos grupos criminales vinculados al narcotráfico.
Noboa ha declarado varios estados de excepción en lo que va de su mandato, que comenzó el 23 de noviembre, en un intento por frenar la ola de inseguridad que ha golpeado a la nación con asesinatos, secuestros y extorsiones, entre otros delitos.
Ecuador cierra 2023 como uno de los países más peligrosos de América Latina, con una tasa de homicidios de 45 por cada 100.000 habitantes, según la policía.
Según el gobierno, las muertes violentas han disminuido un 17 por ciento en lo que va de 2024 gracias a las operaciones de las fuerzas de seguridad.