Los 1,9 millones de palestinos desplazados comenzaron a regresar a sus hogares este domingo, antes de que un acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás entre en pleno vigor a las 11:15 a.m. hora local. Según el Ministerio de Salud de Gaza, la devastación que encontraron refleja la escala de una guerra que ha matado a más de 46.000 palestinos.
La devastación generalizada es evidente en toda la zona. Según datos de la ONU, el 69% de las estructuras en Gaza han resultado dañadas o destruidas, incluidas más de 245.000 viviendas. Si Gaza sigue bajo asedio israelí, la reconstrucción puede llevar más de 350 años.
A pesar de la incertidumbre sobre el futuro y la gobernanza del enclave, muchas familias encuentran alivio en el cese temporal de las hostilidades.


Por su parte, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU informó que los camiones comenzaron a entrar en Gaza por dos cruces tras el alto el fuego del domingo.
En una publicación en X, el PMA dijo que los primeros camiones transportaban paquetes de harina de trigo y comidas listas para comer. Dijo que su objetivo es entregar alimentos diariamente a lo largo de corredores humanitarios que incluyen cruces fronterizos con Egipto, Jordania e Israel.
“Este alto el fuego es crucial para la respuesta humanitaria. Se debe garantizar la seguridad y el acceso”, dijo la agencia.